Se ha fabricado una hiperrealidad basada en simulacros, falsos positivos y símbolos para aumentar la violencia y el odio en la población. |
San Carlos.- La guerra psicológica no es nueva y la misma ha experimentado picos según la situación política y electoral del país, refirió la psicóloga Obilia Suárez, quien señaló que se ha fabricado una hiperrealidad basada en simulacros, falsos positivos y símbolos para aumentar la violencia y el odio en la población.
Para la integrante del colectivo Psicólogos por el Socialimo la derecha se sustenta en una realidad que no siempre es verdad. “Ellos buscan una foto internacional verídica sobre una realidad y cuando esa realidad no existe ellos fabrican esa realidad y la generalizan”.
La imagen de un hombre desnudo frente a una unidad de la Guardia Nacional Bolivariana, que simboliza la desprotección y el desamparo del ser humano, sirvió para la construcción de una hiper realidad de acuerdo con las creencias de cada sector de la población. “Comenzaron a trascender todo tipo de versiones (…) simplemente se aceptó lo que la redes o medios plantearon como verdad”.
La imagen de Lilian Tintori, vestida de negro, diciendo que su esposo, Leopoldo López, estaba muerto, sin signos vitales, generó dudas; y el posterior desmentido de la fe de vida, por parte de sus familiares, avivó la incertidumbre y desconfianza. “Esto nos dice que vale todo, pueden llegar a cualquier cosa para lograr la confrontación entre venezolanos.”
La muerte de Leopoldo López, símbolo de la supuesta dictadura”, a juicio de la especialista, es una justificación perfecta para provocar una rabia mayor en un sector de la población, “para que la gente se lance a la calle” como sucedió en diciembre de 2002 en Altamira, Caracas, con João de Gouveia, suceso que desató todos los límites de la tolerancia.
Con esto se “busca la desintegración psíquica, cuyo objetivo final es la desintegración social, atacando de forma permanente los organismos del Estado, principalmente los cuerpos de seguridad. Quieren quebrar al ser humano que representa la seguridad del Estado, romper con el Estado, quieren que actúen como ser humano y no como órgano de seguridad, para que se desate una confrontación, una guerra de hombres contra hombre”.