Armada, destacó que Convit vivió toda su vida dedicada a la investigación, al desarrollo de salud en el país, realizando significativos aportes a la ciencia, no solamente en Venezuela sino para todo el mundo.
“Quienes tuvimos la oportunidad de conocerlo e interactuar con él sabemos que fue un hombre integro que dedicó su vida a mejorar la calidad de vida de los enfermos”, agregó Armada.
Asimismo, dijo que Convit dejó un gran legado, por eso nuestro reconocimiento
Jacinto Convit, fue reconocido por su descubrimiento de la cura a la lepra y la leishmaniasis y por ello fue postulado en 1988 al Premio Nobel de Medicina.
Motivado por su amor a los pacientes, a quienes nunca abandonó, con solo 24 años de edad, Convit, en 1938, comenzó su trabajo de investigación para hallar la cura de la lepra.
Liliana Araujo